14 Voluntarios de Fundación Telefónica Movistar, provenientes de ocho países, rehabilitaron la escuela República del Ecuador así como los espacios sanitarios y recreativos en el sector de “La Villega”.
Hasta “La Villega” en el cantón manabita de Pedernales, llegaron 14 voluntarios de Fundación Telefónica, provenientes de Guatemala, Chile, Nicaragua, Brasil, Colombia, Ecuador, España, Perú y Venezuela, para contribuir con la comunidad y sobre todo con la población infantil y adolescente.
Los voluntarios, que participan en el programa “Vacaciones Solidarias Internacionales” convivieron desde el 1 hasta el 11 de agosto de 2016 en esta zona rural, muy afectada por el terremoto del 16 de abril, donde rehabilitaron espacios educativos, sanitarios y recreativos al servicio de niños, niñas, adolescentes y sus familias que quedaron en situación de vulnerabilidad.
En “La Villega” se construyeron 3 aulas de 40 metros cuadrados cada una, en material sismo resistente (bambú), así como juegos infantiles recreativos. Además, se adecuó la cancha polivalente (para fútboly básquet), se levantaron nuevos muros de cerramiento y se gestionó el acceso de servicios básicos de agua y luz.
Toda la comunidad se volcó en el proceso de reconstrucción e incluso Los niños fueron los protagonistas en la planificación. Cada uno dibujó su escuela como la soñó: llenas de luz y color, con un área de juegos infantiles, un letrero con el nombre de la escuela y pupitres más lindos. Los niños y niñas seleccionaron ellos mismos como nombre de sus aulas: Las Letras, Aula del Mundo y Unidos somos más.
Jacky Alcívar, Directora de la escuela República del Ecuador indica que no esperaban ver su escuela reconstruida tan rápido. “Se ve totalmente diferente. Una obra que está quedando espectacular con dos aulas pedagógicas y un aula polivalente. Estamos agradecidos infinitamente”.
Para Johana Lillo, voluntaria chilena, la palabra que define el trabajo en la comunidad “La Villega” es satisfacción. “Los niños están contentos con lo que hemos logrado. Si hay algo que me llamó la atención es el trabajo en equipo y la coordinación de la comunidad. Las mamás son increíbles, tienen una garra para trabajar… ¡hacen de todo!” Añade que la experiencia de compartir con la gente de esta zona, les ha servido incluso para redescubrirse a sí mismos. “Somos capaces de todo, por ayudar y ver la sonrisa de los niños. El hecho de ver la gratitud de la comunidad, es gratificante.” Al finalizar esta etapa, 60 niños continuarán su ciclo escolar en aulas más adecuadas para su aprendizaje.
Este es el cuarto proyecto que desarrollan los voluntarios pertenecientes al programa corporativo anual “Vacaciones Solidarias Internacionales”, etapa que se complementa con los 3 Centros Proniño que han sido colocados de manera estratégica en la zona. Pero hay mucho por hacer, es así que otro grupo de voluntarios ya se dirige a la zona de Las Gilces en la provincia de Manabí, donde iniciarán el quinto proyecto programado para este año.